¿Cómo sobreviviremos los
venezolanos en Navidad la furia del Gobierno contra el pueblo por haber perdido
las elecciones parlamentarias?: El Gobierno está furioso por haber perdido las
elecciones parlamentarias el pasado 6 de diciembre. No aceptó con humildad y
autocrítica “el por qué perdieron”, Decidió perseguir aún más a los empleados
públicos y a los presos políticos que están detrás las rejas o encerrados en
sus casas (casa por cárcel).
Decidió robarnos una vez más, la alegría de
la Navidad con más miseria y más tristeza. Seguridad CERO y alumbrados públicos
en el país CERO. Calles y avenidas de Venezuela en penumbras apenas llega la
noche, y que en estas fechas navideñas se hacen más evidentes. El Gobierno de
Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, decidió seguir “manguareando” en materia
económica, monetaria y fiscal.
Decidió hacer lo que sea, antes del 5 de enero
2016 cuando entra la nueva Asamblea Nacional con una mayoría parlamentaria de
la oposición. Tenemos una inflación pavorosa con anaqueles vacíos en
supermercados, abastos y farmacias. Comprar un par de zapatos, ropa interior o
los insumos para una cena navideña y de Fin de Año tradicional, no será posible
para la mayoría del país, entre los cuales me encuentro también. En lo personal
puse mi mente y aspiraciones navideñas en “neutro” al igual que el año pasado.
Me olvido de las tradicionales hallacas que siempre desde que existo,
existieron en las mesas navideñas de los venezolanos.
El tradicional plato tíìpico navideño de los venezolanos: Hallaca, ensalada de gallina, pernil asado o jamón planchado con pan de Jamón, será un lujo inalcanzable en este año 2015 para la mayoría de los venezolanos.En el 2016, la economía venezolana observando la actitud del Gobierno Venezolano, furioso por el triunfo mayoritario de la oposición en la Asamblea Nacional y que desea "cobrárselas" al pueblo con más escasez y más hambre, y sabotear como sea desde sus otros poderes públicos arrodillados a la nueva Asamblea Nacional que se instala el 5 de enero 2016.
Si acaso, sin stress y si es
posible, haría unos bollitos navideños aliñados (hallacas sin relleno) con lo
que pudiese conseguir en el Mercado Mayor de Coche (que trae camiones de lo
poco que hay en los campos venezolanos). Y si no es posible, intentaré cambiar
nuestro tradicional plato navideño: Hallacas,ensalada de gallina, pan de jamón,
pernil o jamón planchado. Por una paella española el 24 y 31 de diciembre,
luego de cotejar precios de mariscos y moluscos en una pescadería de mi
confianza. Si tampoco es posible, buscaría algún bello menú en un libro de
comida vegetariana que conseguí en mi biblioteca.
Comprar algún vino o el
tradicional Ponche Crema, no es posible por los costos fantasiosos de una
economía venezolana totalmente enloquecida y distorsionada, gracias al
socialismo majunche de este gobierno. Al igual que millones de venezolanos, me
olvidaré del ritual de comerse las 12 uvas y de la copa de champaña cuando
llegue el Año Nuevo.
Haré un ritual mágico, es parte
de las fantasías de los venezolanos y de los ciudadanos del mundo, dependiendo
de la costumbre de cada nación, que consiste según mi biblioteca
esotérica-angelical, en poner encima de la mesa antes del arribo de Año Nuevo,
todas las monedas y billetes que tengamos en la casa, para bendecirlos y se
multipliquen,que visualizaremos con mucha luz en nuestras mentes, como si
estuviésemos en una gran bóveda bancaria. Dar a gracias a Dios de estar con
vida y que no nos enfermemos en esta Venezuela pobrísima, así como rezar por el
alivio de los enfermos del país que no tienen acceso a las medicinas, insumos y
equipos médicos indispensables. Yo sufrí esta pesadilla en el 2013 y en 2014
con mi mamá y todavía tengo pesadillas.
Si deseamos alguna bebida “espirituosa”,
podemos hacer un ponche con limones, granadina en jarabe y algunos toques con
vodka o ginebra. Como no puedo poner arbolito de navidad, porque los adornos se
dañaron o muchos se extraviaron, asi como las luces se dañaron, y en la Venezuela
de hoy es incomprable. Saqué del closet un nacimiento del Niño Jesús y una bota
de fieltro de Papá Noel o San Nicolás que puse en mi puerta (hacia adentro).
Para darle un “toque festivo”
al apartamento en el Dia de Navidad y el
31 de diciembre, buscaré en una piñatería una docena y media de globos
multicolores. No le voy a permitir a este Gobierno “maluco”, bruto y avaro de poder ilimitado, por encima de la
mayoría que votó contra ellos el domingo 6 de diciembre en las elecciones
parlamentarias.
Hay que estar claros, que lo
queda de este Gobierno en todas sus instituciones, menos la Asamblea Nacional
que inicia funciones el 5 de enero del 2016, va seguir saboteando con el hambre
y la inseguridad del pueblo. Va intentar
seguir saltando las rejas y las puertas en los “border lines” de la legalidad y
de la Constitución Nacional. El camino
que le toca al país con la nueva Asamblea Nacional, no será nada fácil.
El saboteo, el No al diálogo y
posiciones radicales en todos los órdenes, serán las patadas de ahogado del
Gobierno de Nicolás Maduro y Diosdado Cabello en esta Navidad y en el 2016.
Decidieron no buscar las soluciones de sacar adelante de la miseria a Venezuela,
sino de hundirla cada día más, solamente por “furia política” contra el mismo
pueblo, que antes votaban por éllos, y ya se hartaron de tantas vicisitudes.
Antes de Navidad, eligen “como
sea” a un nuevo Tribunal Supremo de Justicia del tamaño gigante de sus
intereses políticos rojos-rojitos radicales y con una Defensora Pública
Nacional (Susana Barreiros) al servicio del PSUV y del Gobierno, que le lanzó
casi 14 años de presidio a Leopoldo López con la sonrisa de oreja a oreja de
Diosdado Cabello y de los más radicales del Gobierno de Nicolás Maduro.
*Imagenes tomadas prestadas de Internet.