domingo, 7 de julio de 2019

A LOS MUERTOS TAMBIÉN SE LES DEBE HACER FAVORES Y El QUE LE HICE A CLEMENCIA RODRIGUEZ FUE MUY SIGNIFICATIVO Y HERMOSO PARA MÍ...



Abogada Clemencia Margarita Rodríguez, quien NO tenía lápida,ni nada que dijese su nombre desde el 23 de Septiembre del 2017 hasta el 1 de marzo del 2019 !cuando le hago una en mi hogar en apenas 3 horas, para llevársela para en el Cementerio del Este, Municipio El Hatillo, Este de Caracas, precisamente !y sin yo decidirlo el día del cumpleños de mi hija Endrina Toro Giraud.
Mi amiga Clemencia, NO tenía lápida desde el 23 de Septiembre 2017 hasta el 1 de marzo, que le puse una realizada por mi en menos de 3 horas el 18 de febrero 2019, un día luego de saber en dónde élla se encontraba sepultada....
 Desde dónde descansan los restos mortales de Clemencia Rodriguez, se visualiza de manera muy hemosa Caracas y el Cerro de El Ávila...
Ruta para llegar a la  tumba de Clemencia...
En este lugar exacto descansa Clemencia....Feliz de haberle dado un nombre y colores en dónde descansa....
 El querido amigo, el profesor (Quimico de la ULA) Félix Basilicio Vásquez Oropeza, observa cómo nos quedó arreglada la tumba de Clemencia...!un regalo espiritual que me  hizo muy feliz!....
Pétalos de flores para darle color a la tumba de Clemencia...antes de esto, solo era tierra ni nada que indicara que allí descansaba élla...
 En todo el frente de este monumento de la Alcaldia del Municipio Sucre, se encuentra la tumba de Clemencia...
En ese lugar precisamente, subiendo por los cajeros automáticos del Banco Banesco, se encuentran los restos mortales de la abogada Clemencia Rodríguez pero con una lápida que NO tenia....y que se la hice en apenas 3 horas en mi casa...

A LOS MUERTOS TAMBIÉN SE LES DEBE HACER FAVORES: A los difuntos !también se  les debe hacer favores y esta es mi historia con  la abogada Clemencia Rodriguez, que NO tenía lápida y estaba perdida en la inmensidad del Cementerio del Este: Clemencia Margarita Rodriguez Aponte fue una excelente abogada y una implacable luchadora de las injusticias en dónde las viese. Trabajó por muchos años en la extinta Gobernación de Caracas y en la también desaparecida Alcaldia Metropolitana de Caracas. Fue mi amiga y ambas éramos madres solteras.

Compartíamos la misma visión política y el mismo enfoque de cómo debían ser las cosas en la Administración Pública. Vivía en la Urbanización Santa Mónica y siempre nos encontrábamos para hablar del país y de nuestros dos hijas (Juan Carlos y Endrina que son de la misma edad).
Clemencia se enferma de cáncer y pocas personas se enteraron, no deseaba que la viesen tan delgada y sin  cabello. Me entero de su muerte, mucho tiempo después por su compañero sentimental de varios años el profesor (quimico de la ULA) Félix Basilicio Vásquez Oropeza, quien también es mi amigo desde los 90,porque también trabajó en la extinta Gobernación de Caracas, adscrito al Cuerpo de Bomberos de la capital.

El 2do sábado del mes de Febrero 2019, Félix Basilicio me viene a buscar en su carro para ir a un acto de Juan Guidó en Los Cortijos de Lourdes y para que luego fuésemos al lugar en dónde estaba sepultada Clemencia en el Cementerio del Este. Solamente él y la familia más cercana de élla, sabían cómo llegar en dónde estaba.

Recuerdo cúando llegué al lugar me sentí muy afectada ,porque MI CLEMENCIA estaba en un punto perdido del Cementerio, subiendo por dónde están los cajeros del Banco Banesco. Todos los difuntos tenían una lápida o un nombre que indicaran que allí se encontraba una persona que existió en el mundo de los vivos, que habían dejado una huella en sus seres queridos y amigos. Un lugar, en el cual el UNIVERSO podía visualizar en dónde estaba ese difunto que en otros momentos sonrió, lloró e hizo favores a otros. Pero esto NO pasaba con Clemencia.  No se sabía que en un cuadrado de grama seca, élla estaba, ni nadie fallecido en ese desolado lugar.
Sentí una gran desolación en mi interior y me negaba aceptar que nada indicara que élla estaba enterrada en esa parcela. Todas las tumbas tenían un nombre y una fecha de nacimiento y muerte, pero la de Clemencia NO.
Me arrodillé en su tumba sin nombre y le dije: Querida amiga, no voy a permitir que en donde están tus restos mortales, nadie sepa que en este lugar descansas. No voy a permitir que en este lugar NO esté tu nombre con tu fecha de nacimiento y de muerte. NO voy a permitir que todos los difuntos tengan un nombre en este lugar y quien desee les puede rezar, mientras tú NO. Te prometo delante de Félix, que es quien tiene carro para traerme a este lugar y si NO lo hace, ¡le jalas los pies cuando esté descansando!, que cómo sea  voy a tallar tu nombre en lo que consiga apenas llegue a mi casa esta tarde.  Quien venga a este lugar, debe saber que también existió una persona que se llamó CLEMENCIA MARGATIRA RODRIGUEZ APONTE, que fue una abogada de causas justas que hizo muchos favores, sin cobrar nada.
Le recé varias oraciones con Félix Basilicio Vásquez Oropeza. Le pusimos agua a la tierra seca en dónde estaba y le dije que la quería mucho y que la recordaría por siempre.
Luego de esto se sintió una agradable brisa y me parecía ver sonreir a Clemencia,porque élla sabía, que lo que ofrezco siempre lo cumplo, pero le  hice la salvedad, que Félix NO podía fallarme en llevarme en su carro cuando yo todo lo tuviese dispuesto.
Esa misma noche, apenas llegué a mi casa, busqué en el balcón de mi apto y en el Closet del cuarto de mi mamá Rosa María, en dónde podía hacerle una sencilla lápida con su nombre, fecha de nacimiento y fecha de muerte. Fue al día siguiente, que se me despejó la mente e hice su lápida en una cerámica de color blanco que tenia guardada con otras en el balcón. La limpié y luego la voltié, para diseñar con un marcador de tinta china y una regla todos sus datos.
…Conseguí de ¡milagrito!,un potecito de pintura transparente para proteger la parte rugosa de la cerámica de los embates de la lluvia y del calor. Conseguí unas tizas de colores, y le puse unas florecitas a la Lápida. Todos  estaban vueltos ¡locos! en su entorno inmediato, cómo mandarle hacer una lápida de granito o de metal inoxidable, que en los cementerios SOCIALISTAS del país ¡se los roban en complicidad con los obreros y jardineros de los cementerios!, empezando en el Cementerio del Este (Municipio El Hatillo, este de Caracas)..!pocas  lápidas de cierto valor han logrado sobrevivir al malandraje del Socialismo del Siglo XXI en los últimos años, al igual que las flores de los difuntos se LAS ROBAN de manera descarada (son los mismos obreros del lugar, no es la gente que visita el Cementerio).
El caso, que logré hacerle la lápida a Clemencia y me sentí MUY FELIZ, cuando la vi terminada y sé que élla también. Lo sé, lo percibí, al igual que el amigo Félix Basilicio, su compañero sentimental de más de una década.

Desde el momento que le hice la lápida y se la recé en mi casa con agua bendita, me pasaron cosas bonitas e inesperadas: ¡Los muertos son muy agradecidos!....y actúan de maneras increíbles o mágicas.
Por mil razones, pasaron varias cosas por dos veces cuando íba ir con Félix Basilicio, a ponerle la lápida a Clemencia. Dos veces, tuvimos que devolvernos a pocos minutos de que cerraran el cementerio al público, que es hasta las 4 pm las visitas. El caso es que la fecha escogida por Clemencia ¡fue el viernes 1 de marzo, día del cumpleaños de mi hija Endrina Toro Giraud!. Un día muy especial en mi vida, como el de cualquier madre (y más si es única hija).
Fue el día ¡decidido por Clemencia!, luego de varios inconvenientes “tontos” que no tenían nada que ver conmigo, sino con Félix Basilicio, hasta de una chavista que cuando ¡ya venía a recogerme a mi casa por 2da vez en dos semanas desde el 18 de febrero con la lápida lista! le pidió un favor a última hora, e hizo que cuando llegamos al Cementerio del Este, NOS devolvieran a 5 minutos para las 4 pm ,cuando cierran las visitas al público para visitar las tumbas.
Clemencia, escogió que le pusiera la lápida en su tumba el viernes 1 de marzo. Fue la fecha que dispuso de manera hermosa y misteriosa, porque era el cumpleaños de mi hija y deseaba compartir ese momento conmigo ¡con mi hija fuera del país!.  Llevé una vela roja e inciensos con aroma a rosas. Llevé una bolsa de pétalos de flores de varios colores. Le llevé un bonito florero artesanal de plástico que le hice de una  botella de refrescos, porque algo distinto se LO IBAN A ROBAR EN EL CEMENTERIO. Llevé algo de cemento gris para pegar la lápida y Félix algo de pego para cerámicas.  En verdad, que todo esto me dio una alegría indescriptible. Me sentí muy feliz por darle un nombre con su fecha de nacimiento y muerte en dónde estaban sus restos mortales. Félix y yo nos afanamos con su tumba el  pasado 1 de marzo. En verdad, que la pusimos bien bonita ese dia y le rezamos bonitas oraciones.

Este dia fue muy especial por ser el cumpleaños de m hija. Es de destacar, que yo NO iba al Cementerio del Este desde el 1 de marzo del 2016,(¡cumpleaños de mi hija!) cuando sepultamos al oficial de la Marina Mercante Gianmilouis Marcano, fallecido trágicamente en un accidente de tránsito en la Urbanización Montalbán a los 29 años de edad, hijo Milagro Serrano Clavijo, madrina de bautizo de mi hija…Ese cumpleaños de mi hija del 2016, fue de una profunda tristeza para mí y lloré muchísimo. Paradójicamente, el mundo de los difuntos actúan de manera ¡increíble y no se pueden ignorar lo que tratan de decirnos!.

Me sentí muy feliz este 1 de marzo del 2019. Le dí gracias a Dios por poder servirle a Clemencia y  por estar mi hija a salvo fuera de Venezuela. De allí, nos fuimos Félix y yo a merendar con café y  una porción de torta de chocolate en una  Panadería  muy conocida de la Urbanización El Cafetal para celebrar por el cumpleaños Nro 27de   mi hija y porque sabíamos que Clemencia estaba muy contenta ese dia…!Dios la bendiga y le dé mucha luz a mi querida amiga, abogada de las causas justas y de los más necesitados!.