El gran "comodín" electoral del Gobierno de Maduro y de un país empobrecido-arrasado por su pésima gestión, ha sido usar parlantes desde jeeps y camiones en sectores populares, que tradicionalmente han votado desde 1998 por Chávez . Están "corriendo" intensivamente por no perder la lealtad de quienes siempre votaron por Chávez, así tuviesen hambre y frío o acorralados por el hampa desbordada en Venezuela.
Vivo en un circuito electoral (el 4 de Caracas) en la cual siempre ha ganado el
gobierno, sin importar si sus diputados, concejales o alcaldes lo hagan muy mal
y la delincuencia sea la dueña de los barrios. Son los circuitos electorales,
que aunque sumen en votos a nivel nacional menos, al final suman más curules en esta “democracia rojita” que hace con menos votos, más curules. El Gobierno, ha
centrado sus esfuerzos propagandísticos-sicológicos en los circuitos
electorales en los que siempre ha ganado desde 1998.
En mi conjunto residencial (3 edificios), todos los
conserjes o “trabajadores residenciales” votan por el gobierno, desde un
aparente bajo perfil político como estrategia de estar bien con Dios y con el
diablo, porque se ganan ingresos extraordinarios con trabajos particulares con
sus afines rojitos en la comunidad y con los que no están con el gobierno. Vivo
en un apartamento ubicado en planta baja, hacia la calle. No tengo afiches
políticos ni en mi puerta, ni en mi balcón, ni tampoco “caceroleo” por razones
de prudencia y de seguridad. En la planta baja, incluyendo la Conserjería (5 apartamentos) la
única “no gobiernera” soy yo.
En el primer piso de cinco familias, 3 familias son
abiertamente chavistas y dos son “Ni-NI”. Todos ellos están con el gobierno,
así hagan gigantes colas para comprar productos esenciales de la dieta diaria
(que NO hay), así no consigan las medicinas de sus hijos, nietos, madres,
padres, etc. Así no cuenten con el servicio oportuno de los bomberos (por falta
de unidades) en alguna emergencia grave o los ruleteen inhumanamente en los
hospitales públicos.
A nivel nacional, mucha gente no quiere al gobierno,
o es abiertamente crítica del mismo, incluso dentro de sus circuitos
tradicionalmente rojitos, en donde nunca la oposición ha tenido chance
electoralmente, como tampoco lo tiene el Gobierno, por ejemplo en el Municipio
Chacao, Baruta y El Hatillo de la zona Metropolitana de Caracas. Hay una gran
disposición del país que quiere una Venezuela distinta, a la arruinada y país
aterrador (índices delictivos más altos del mundo) que va a votar masivamente
este domingo 6 de diciembre.
Mi gran incógnita de este domingo 6 de diciembre,es cuàl será el comportamiento
electoral o de “motivación” de ese pueblo (así tenga hambre y frío) que siempre
votò por Chávez y que en muchas paredes tienen grafitis de “Chávez SI, Maduro
NO”. En los últimos días, el Gobierno ha
reforzado hasta el aturdimiento su campaña, en los territorios que han ganado electoralmente desde
hace 16 años, usando hasta el cansancio el “retumbe de voz” desde el más allá
de Hugo Chávez. Buscan otra vez el voto de ese pueblo que se "acostumbró estar muy mal gobernados", y siempre votaron por quienes no los atienden nunca o ayude a la comunidad el
Diputado o Concejal “rojito” que los representa en su “maltrecho
circuito electoral”.
Si hay un gran descontento-decepción con el Gobierno de
Maduro en estas zonas. Hoy la gente de estos sectores rojitos se queja contra
el actual Gobierno, hablan mal de
Diosdado Cabello (Presidente de la Asamblea Nacional) desde la punta del cerro
más pobre y dominado por “pranes”, pero de “repente” se les enciende un suiche
como robots cuando escuchan la voz de Chávez desde los parlantes del Gobierno en Jeeps o camiones
en sus mensajes más radicales, hasta antes de despedirse del país y en cadena nacional en diciembre 2012, cuando
estaba en la última fase de su enfermedad, y pareciera que siguen anclados
emocionalmente y sicológicamente al fantasma del desaparecido Presidente.
Aspiro y
espero que la mayoría del pueblo venezolano vote con entusiamo por un país muy
distinto al que tenemos hoy, que es una auténtica pesadilla. Necesitamos una
Asamblea Nacional plural, que legisle. vigile y controle a un Ejecutivo
Nacional que funciona como un Emperador romano todopoderoso. Hay que ir a
votar, así truene y relampaguee. Apostemos por una Venezuela pròspera y para
todos los venezolanos.