lunes, 29 de junio de 2020

29 de junio...UN CUMPLEAÑOS NO TAN FELIZ EN CUARENTENA RADICAL EN EL CUAL SÓLO ESCUCHO MIS ORACIONES CON EL ALMA ENCOGIDA DEL FRÍO INFINITO DE TODOS LOS AUSENTES DE MI VIDA


Paula M. Giraud Adriani,en su cumpleaños Nro. 3, Edificio Vasallo, Crucesita a Porvenir, Parroquia San José....Caracas...


Paula Giraud Adriani, cuando estaba cumpliendo 5 años, cargada por mi mamá Rosa María y mis tíos Jaime Granados y Marta Giraud de Granados. Parroquia San Agustín del Norte, Esquina de Páez a Girardot. Caracas
Mi mamá Rosa María Adriani y YO entre flores...

Del 27 de junio Día del Periodista para el domingo 28 en medio de la total quietud en la Parroquia El Valle, porque el enemigo invisible ¡también llegó!, me sentí sobrecogida en lo más profundo de mi interior.El alma me duele y los latidos del corazón están apurados y arrítmicos. Pienso en mi mamá Rosa Maria, en Carmen Cecilia Adriani, en Lupita,en Margarita, en mi papá, en mis abuelos y tios paternos, en mi bisabuela Josefa, en los primos queridos  que se fueron, en  mi gran amor que se fue para la eternidad en el 2001, en varias  amigas y amigos cercanos que se fueron antes de tiempo….

No dormí casi nada, a pesar de sentirme muy cansada desde hace varios días, estoy muy sobrecargada de cosas por hacer y que NO se han hecho por falta del bendito dinero, en un  país como Venezuela en el cual esta GENTE nos empobreció de una manera grotesca, y muy pocas cosas se pueden resolver, lo que antes lo resolvíamos de un día para otro. Me puse desde muy temprano hasta las 5 de la tarde hacer mis  3 postres PARA MI. Cociné para dos días porque tenía agua y también tener mis cosas que me gustan LISTAS un día antes del 29 de junio. Y como precaución que mi alma cansada y el agotamiento físico NO me permitiese levantarme de mi cama este lunes. Siempre, he sido  muy precavida conmigo  misma, todo lo trato de hacer mínimo 24 horas antes. Detesto hacer las cosas contra reloj.

Los 29 de junio desde que nací era el día más importante de mi mamá Rosa María, y es honor a ella, así me sienta FATAL hacer los  postres que a ambas tantos nos gustaba. Ordené hasta dónde pude y limpié el piso con cloro. Lo hago por ella, y porque sé que me  está viendo. Ahora, solo me queda DESCANSAR y DESCANSAR este lunes 29.No salgo NI a botar basura. Ya todo lo hice.
Rememoro mis lindas fiestas de cumpleaños que mi mamá con tanto esmero y amor infinito me organizaba cuando era una niña y una adolescente….

Recuerdo muchos momentos en tiempos que tenía una familia que mucho me amaba y me consentían con besos y abrazos…Recuerdo la Venezuela que tuvimos con muchos cumpleaños felices, porque era fácil comprar un lindo pastel y todo lo que se necesitara para hacer la mejor FIESTA de dónde uno viviese. O celebrarlo por todo lo alto con mis padres en la Cota 905 del desaparecido Hotel Caracas Hilton…como fue cuando yo cumplí 16 años y un elegante norteamericano andaba ¡prendado de mí!, hasta que supo mi edad y la  tristeza le inundó el rostro. Le dijo a mis padres en inglés: Si ella fuese mayor de edad, en un mes me caso con ella…. ¡qué lástima!....

Desde hace 9 meses, yo había ido guardando los ingredientes de una torta, una gelatina y una Pepsi Cola para regalármela este 29 de junio, fecha en la cual por cierto también cumple años nuestra recordada actriz de Hollywood y  Miss Venezuela en Londres María Conchita Alonso nacida en Cuba y estadounidense desde el 2007. También se conmemora los 101 años del fallecimiento de nuestro SANTO, el Dr. José Gregorio Hernández. Dos personas desde ámbitos totalmente opuestos, sigo sus historias de cerca desde siempre y a los 3 nos une una misma fecha: El 29 de junio.

Mi regalo de cumpleaños es  descansar, dormir y comer mis dulces. El alma me duele, los latidos del corazón están apurados y arrítimicos…Mis recuerdos me acompañan en medio de este infinito silencio con una cuarentena radical (en El Valle solo 3 horas para comprar lo que sea desde el viernes 26 de junio) y sin televisión ¡sin Directv! desde el 15 de mayo….Mis ancestros me cuidan y rezar el rosario para salir de esta gran tristeza en la que me encuentro. Hace 6 años yo estaba sentada sola en una pequeña sala de la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital de los Magallanes de Catia u Hospital Dr. José Gregorio Hernández, esperando ver a mi mamá a las 4pm…Y recuerdo que élla me dijo bajito al oido: ¨Miriam, deseo que vayas a comer sabroso en el Centro Comercial San Ignacio. Y luego te vas a comer dulces a la pastelería que tanto nos gusta. Prométeme que del Hospital te vas para allá.¨