martes, 2 de agosto de 2016

ESTOY FASTIDIADA Y "MATO"POR UN TROZO DE PASTEL, PERO EL GOBIERNO DE MADURO NOS ROBÓ HASTA LA DULZURA DE LA VIDA...

ESTOY FASTIDIADA Y “MATO” POR UN GRAN TROZO DE PASTEL E IRME A UN SIMPLE PASEO AL CENTRO COMERCIAL SAN IGNACIO EN LA CASTELLANA (ESTE DE CARACAS)…PERO ESTAMOS EN LA VENEZUELA  DEL GOBIERNO QUE TODO NOS LOS ARREBATÓ... 


Añoro mis salidas dominicales en el  Metro de Caracas, cuando paseaba tranquila y con dinero que me alcanzaba para comer lo que me diera la gana e ir al cine con combo incluído. Añoré en este súper aburrido domingo 31 de julio y como todos los fines de semana, cuando me iba para el Centro Comercial San Ignacio (La Castellana/ Chacao-Este de Caracas).

Ese fue siempre mi Centro Comercial favorito de la capital. No tenía “el bululú” del gentio en  El Sambil o del CC El Recreo en los cuales los caraqueños buscaban un sitio donde sentarse (full todo) o hacían grandes colas para ver una película en sus muchas salas de cine. Tampoco me gustaba el Centro Comercial El Tolón, que está ubicado en Las Mercedes, además del enredo para los que no tenemos carro, para llegar allí.

Siempre el CC San Ignacio fue un lugar en donde siempre me sentí muy a gusto y me parece hermoso, fácil acceso(Metro). Mucha gente bonita y sin prisa. ¡Hoy nada que ver…!.Nada de salir para disfrutar esas cosas sencillas y darse el “peligroso lujo” de salir de allí a las 6:00 - 7:00 pm de disfrutar una película y luego merendar y poder escoger entre en un montón de negocios lindos de ricas tortas grandotas o pay de manzana con un exquisito café con leche…Nada que ver (susto) de regresar a mi casa (Parroquia El Valle) de noche o a las 6pm, en donde tenemos a  toda la ciudad con  CERO vigilancia policial y los delincuentes acechando en todas partes…

Tampoco tengo la opción como siempre lo hacía, en que me ponía a hacer una rica torta decorada bien bonita, para disfrutarla los fines de semana en mi casa, además del quesillito en la nevera o unas ricas manzanas  cocinadas a fuego lento en gelatina, un exquisito postre, que mi mamá me enseñó hacer a la edad de los 12 años, así como hacer ricas tortas. En la cocina, todavía tengo el batidor eléctrico Oster que mi mamá compró en los años 60 en el desaparecido Bazar Caracas (Sabana Grande). Tengo en una caja mis torteras, mis paletas de madera para mezclar, mis mangas para decorar, mis envases para hacer ponquesitos…

Nada de azúcar, nada de mantequilla, nada de harina leudante, nada de esencias para dar sabor, nada de Nevazucar para decorar, nada de colores vegetales para alegrar un decorado, nada de nuestros exquisitos chocolates para hacer una rica cubierta de una torta, que siempre fueron los mejores del mundo, desde los tiempos de la independencia del país. !Nos robaron hasta la  dulzura de la vida y  los sencillos placeres de la vida cotidiana!....