Amanecimos más pobres TODOS el sábado 13 de agosto 2016 con el aumento salarial
de Nicolás Maduro desde el 1 de septiembre. El salario mínimo ahora se ubicará
en 22.500 bolívares y el cesta ticket en 43.050 Bs. El 1 de mayo Maduro
incrementó a 30% en el salario mínimo nacional, en 15.051,15 bolívares con un
cesta ticket de 18.489 Bs. Maduro aumentó otra vez de manera POPULISTA contra “la
guerra económica”, sin un plan serio y técnico con el BCV para enfrentar la
inflación y fortalecer a nuestro pobrísimo bolívar, que no tiene ningún valor
fuera del país ni en Venezuela.
Su plan con el BCV ¡otra vez! es fabricar más
billeticos de 100 Bs (sin respaldo) e inundar al país de dinero inorgánico. No
hace falta ser economista, para saber el ABC de la Economía, porque en
Venezuela, el más gafo se aterra con cada aumento salarial que el Gobierno
anuncia, porque sabe que si un salario mínimo del mes de mayo 2016 le permitía
de “milagro” comprar 7 o 8 cositas, a partir de YA, podrá comprar 3 o 4
cositas.
Dijo Nicolás Maduro Moros, en
cadena televisiva con la cara muy feliz de Cilia, bien alimentada, rozagante y
con uso de cremas costosas traídas del exterior para su cuidada piel, así como
de la otra feliz Ministra muy joven, creo que debe estar enamorada de èl,
porque lo mira “embobada”, cuando anunció que el salario aumentaba en 50%: El ingreso mínimo
“global” pasará de Bs. 33.636 a 65.556 con el cesta ticket para los
trabajadores activos. Los jubilados en Venezuela y en el exterior nos moriremos
“más de hambre”, primero que nada que no cobramos ningún cesta ticket, y
todavía a estas alturas un montón de entes del Estado, ni siquiera han podido implementar
el 30 por ciento del pasado 1 de mayo.
Del aumento salarial de mayo, los
productos de todo tipo se dispararon en un mínimo de un solo golpe y de
inmediato en un 100 por ciento al dia siguiente (2 de mayo), igualmente los
servicios públicos y privados se dispararon en cifras de miedo. Desde el 2 de
mayo pasado, en mi casa y en miles de miles de hogares, compramos muuuucho
menos lo que NO HAY en supermercados y el mercado negro de los “bachaqueros”
hicieron y hacen fiesta con todos los precios que se dispararon de manera
brutal. Nuestro billete de más alta denominación que es el de 100 Bs, solo
alcanza hoy para comprar una zanahoria, pero
no nos permite comprar ni un poquito de cilantro o de perejil.
Me molestó inmensamente, la burla
de Maduro pidiéndole a Cilia Flores (la Primera Combatiente –denominación ridícula
de este Gobierno y no Primera Dama-, pidiéndole full risas, que le buscara sus
cestatiket en su costosa cartera (que jamás obviamente aparecieron en cadena),
al igual que contándole al país de su salida al cine con Cilia con un gran
combo de cotufas para ver la última saga de Jason Bourne que protagoniza el
actor norteamericano Matt Damon, film que recomendó ampliamente al pobrísimo
pueblo venezolano: ¿A cuál cine de la capital iría a disfrutar este filme, el
cual muchos no podemos ver? ¿Cuándo fue el cierre del Gobierno de una sala
completa de cine del Este de Caracas para uso exclusivo de la pareja
presidencial y sus jalamecates más cercanos
para ver a Jason Bourne?…
A partir de mi recibo de
Condominio del mes de Septiembre, pagaré el salario global del “Trabajador
Residencial” o Conserje de mi edificio (Parroquia El Valle-Caracas), quien tiene además el tiempo como todos
los trabajadores residenciales del país de hacer trabajos de plomería a costos
ajustados a la súper inflación, además de estar liberados estos trabajadores de
todos los pagos, incluyendo el pago de las TV por cable, que se los dan de
gratis a los Trabajadores Residenciales o Conserjes.